!!!MASCOTAS¡¡¡
-La adolescencia es la edad ideal para empezar a asumir responsabilidades y qué mejor que empezar por tener una mascota. A quién no le gusta la idea de tener un animal de compañía que lo reciba con demostraciones de cariño luego de un largo día.
La mayoría de los jóvenes soñamos con tener una mascota que se convierta en un compañero fiel con quien compartir largas horas de diversión, pero nuestros padres esperan de nosotros cierto grado de compromiso para hacernos cargo de ella.
Y es que tener un animalito en casa no es cosa de juego. Por ello debemos ser concientes de nuestra paciencia y del tiempo que podamos dedicarles antes de elegirlo. Pensando en ello te ofrecemos un listado de recomendaciones a tener en cuenta antes de escoger un compañerito fiel.
La mascota por excelencia suele ser el perro pero debemos saber que los caninos necesitan muchos cuidados y sobre todo espacio. Si vivimos en un departamento tenemos que contar con tiempo disponible para sacarlo a pasear por los menos dos veces al día. Si nuestra rutina no lo permite es mejor optar por otro tipo de compañía.
Los gatos son animales muy independientes, pero aún así no basta con una caja de arena y la comida adecuada para que sean felices. Los mininos son muy quisquillosos y debemos mantener limpia su litera para evitar que hagan sus necesidades fuera de ella. Además se deprimen fácilmente si no tienen compañía. Una opción, si pasamos mucho tiempo fuera de casa, es tener una parejita, pero eso depende del espacio y de la tolerancia de cada familia.
Las aves, los peces y los hamsters son mascotas muy delicadas y requerirán que su hábitat sea aseado constantemente para evitar enfermedades y olores desagradables.
Además de todos estos tipos de mascota, existen las llamadas ¨exóticas¨ como tarántulas, iguanas, sapos y hurones, pero adquirir una de este tipo es atentar contra la ecología y la naturaleza, la idea de tener una mascota es darle una vida adecuada y no alejarla de su hábitat natural.
Finalmente debemos tener en cuenta que las mascotas, sean del tipo que sean, ocasionan siempre un gasto y debemos estar seguros de poder asumirlo. Al igual que cualquier ser vivo los animalitos sienten y tiene derecho a vivir en las mejores condiciones. Por ello, antes de decidirnos a tener uno, debemos pensar si somos realmente capaces de hacernos cargo de él.
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